Mittersill, vacaciones en los Alpes

Mittersill

Muchas y muy variadas son las excursiones que se pueden hacer en Austria. A la hora de moverse por el país siempre se suelen recomendar dos opciones: una el tren, y la otra alquilar un coche. Si el tiempo lo permite (especialmente en verano, en invierno hay que tener mucho cuidado con el hielo y la nieve de las carreteras) yo prefiero esta última alternativa. Así disfrutáis libremente de todos los paisajes, pueblos y ciudades del país.

Así de esta manera fue como llegamos hasta Mittersill, un pequeño pueblo situado a 130 kilómetros al sur de Salzburgo. Sencillamente es uno más de esos pequeños pueblos de los Alpes que en invierno se llenan de turistas para disfrutar de la nieve. Al estar apenas a 30 kilómetros de Kitzbuehel es uno de los rincones favoritos para los amantes de los deportes invernales. Hay un teleférico que precisamente conecta el pueblo con esta estación de esquí.

Su belleza natural es lo más llamativo de Mittersill. Atravesada por los ríos Salzach y Felber, aparece rodeada por hermosos valles y colinas. En invierno todo aparece completamente blanco, pero en primavera y verano la explosión de colores os cautivará. Paseos en trineo, snowboard, campos de golf y el maravilloso Parque Nacional de Hohe Tauern son algunos de los grandes atractivos de esta pequeña población.

Evidentemente la temporada alta tiene lugar en invierno. Son miles los turistas que se acercan hasta aquí, de ahí que siempre sea interesante reservar alojamiento con bastante antelación. Dentro de la ciudad en sí tendremos la oportunidad de disfrutar de su castillo del siglo XII, la Iglesia de San Leonardo del XIII (aunque con añadidos posteriores, como la cúpula en forma de cebolla del XVIII), la Iglesia de Santa Ana o la Iglesia de San Nicolás.

Mittersill es un pueblo con encanto en el corazón de los Alpes. Cualquier época es buena para pasar unos días de descanso en él. Si vais en primavera o en verano encontraréis temperaturas muy agradables para hacer senderismo y otros deportes. Si preferís el invierno, hay que venir bien abrigados. Eso sí, después de un día de esquí y snowboard seguro que entráis en calor.

Foto Vía Ricardo Mireille



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