Los túneles del Schlossberg en Graz
Pocos pueden imaginar al contemplar el Schlossberg de Graz que en el interior de esta famosa montaña, justo en medio de las entrañas de roca, existe un entramado de túneles. Múltiples caminos, con sus entradas y salidas, que recorren el macizo montañoso cual gusanos, para servicio de los antiguos ciudadanos de Graz. Fue durante la Segunda Guerra Mundial, entre 1943 y 1945, cuando este sistema de túneles similar al de las minas fuera creado.
El objetivo era proteger la población de los ataques enemigos con un conjunto de pasadizos cuyos 6,3 km de longitud se extendieran por 12.000 m² y contaran con 20 salidas hacia diferentes zonas de la ciudad. Además, el sistema contaría también con un búnker con capacidad para 40.000 personas. Hoy en día, los túneles que se extienden bajo el Schlossberg son sólo una pequeña parte de este increíble objetivo, las obras nunca se llegarían a completar, pero se sabe que sirvió de refugio a la población durante los últimos años de la guerra.
Así, tras una historia tintada de conflicto y pena, se alza en la actualidad el quinto complejo austriaco incluido en el listado del Patrimonio de la Humanidad protegido por la UNESCO. Hoy en día, resulta impresionante recorrer uno de los túneles más famosos, aquel que nace en el plaza Schlossbergplatz para llegar hasta la Karmeliterplatz, un sendero transitable a pie preparado para la evocación directa del pasado austriaco.
Otros túneles han sido empleados en la construcción del «Dom im Berg». Un lugar con capacidad para 600 personas que permite la celebración de todo tipo de eventos en el corazón de la montaña y que también ofrece un singular espacio donde disfrutar de la fiesta nocturna en Graz.
Desde finales de los años 60 existe, además, un trenecito llamado Märchengrottenbahn que transita parte de los túneles. Este medio de transporte garantiza una experiencia única para los niños, que admiran con ojos atónitos el mundo de fantasía nacido en la panza de la montaña; princesas, caballeros, dulces enanitos y lobos malvados se reúnen en los túneles para hacer las delicias de los más pequeños visitantes. El Märchengrottenbahn supone una gran oportunidad de disfrute para toda la familia y además a un precio bastante razonable; por ejemplo, la entrada para 4 personas cuesta 10€ y también se ofrecen tarifas reducidas para grupos.